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¿CÓMO IMPLEMENTAR EL APRENDIZAJE SOCIOEMOCIONAL?

Escrito por Cristian Gómez Valderrama Armónico Agencia Consultora. *

El aprendizaje social y emocional es un proceso que tiene por objetivo equipar a las niñas, niños y adolescentes con las habilidades necesarias para llevar una vida productiva, saludable y con propósito. 

Este proceso debe tener en cuenta los contextos sociales, culturales y de género que influyen en la capacidad de los y las estudiantes para adquirir dichas habilidades. Así mismo, para implementarlo en las aulas es necesario fomentar experiencias de aprendizaje seguras y equitativas.

Fortalecer las competencias socioemocionales posibilita el desarrollo de habilidades importantes para la vida y el desarrollo personal tales como: el pensamiento crítico, la empatía, la creatividad, el trabajo en equipo, la toma de decisiones, la autoconciencia y la autorregulación. 

Además, es importante reconocer que el aprendizaje social y emocional tiene que incorporarse siempre que se desarrolle una clase o una reunión. Pero antes de los encuentros, se tiene que considerar el escenario, las necesidades y el tamaño de los grupos para decidir la mejor manera de llevarlo a cabo; por ejemplo, tomar turnos para compartir en voz alta, usar el chat o dividir el curso en grupos pequeños o en parejas. 

A continuación, compartimos 3 prácticas de aprendizaje social y emocional que se pueden aplicar todos los días: 

1. Actividades de acogida: en lugar de empezar directamente con la temática, se puede comenzar con breves rutinas de inclusión, brindando experiencias interactivas y motivando a los y las estudiantes a expresarse y conectar con los demás. 

Ejemplos:

  • Utilizar estrategias para que los y las estudiantes identifiquen sus emociones y sean conscientes de sí mismos. Se pueden utilizar imágenes y bancos de palabras para ayudar a desarrollar vocabulario.
  • Tener una conversación sobre la bondad, pidiendo a todos y todas que compartan un acto de solidaridad que hayan hecho o recibido recientemente.

2. Estrategias de participación: crear experiencias de aprendizaje en las que las y los estudiantes se involucren naturalmente con sus compañeros y con sí mismos. Por ejemplo, en los trabajos en grupo se puede permitir que cada estudiante hable de sus expectativas, brindar oportunidades para que construyan a través de la comunicación y la colaboración con sus compañeros e incorporar descansos de movimiento para refrescar y reiniciar el cerebro. 

3. Cierre optimista: lo más importante del proceso de aprendizaje es la reflexión y comprensión de la experiencia porque permite apreciar tanto colectiva como individualmente lo que se ha logrado y anticiparse a lo que sigue. 

Ejemplos:

  • Propón la reflexión desde un chequeo de las emociones realizando cuestionamientos como: ¿Qué palabra resume tus sentimientos sobre nuestro trabajo en equipo? 
  • Pide a los y las estudiantes que reconozcan algo por lo que estén agradecidos. Guíalos a pensar profundamente y a nombrar los sentimientos que están experimentando.
  • Usa un planificador y ayúdalos a mirar hacia el futuro para seguir adelante y ofréceles la oportunidad de fortalecer la responsabilidad a través de los objetivos y la organización.

A medida que los y las docentes utilizan estrategias, actividades y protocolos atractivos, requerirán ofrecer opciones interactivas y reflexivas. También es importante brindar tiempo para hablar sobre estas experiencias, identificar y conectar lo que se está haciendo con las competencias y habilidades específicas del aprendizaje social y emocional. 

Así mismo, es fundamental comprender que las relaciones entre maestros y estudiantes tienen un gran impacto en el aprendizaje, por lo que centrarse en el papel del docente puede conducir a un mejor desempeño académico. Las actitudes de las y los maestros frente a experiencias de las niñas, niños y adolescentes como: miedo de no tener la respuesta correcta, avergonzar a algún estudiante o no comprenderlos, pueden influir en la autoestima, la confianza y el desempeño escolar. 

En gran parte, el propósito del aprendizaje social y emocional es fomentar la expresión emocional, pero en algunas ocasiones evaluar el éxito del proceso es complicado para los y las docentes. Estas son dos formas de hacerlo: 

  • Autoevaluación: pídeles a los y las estudiantes que examinen su propio proceso y luego lo compartan con el grupo. 
  • Evaluar escenarios simulados: utiliza escenarios similares a los juegos para plantear tareas interpersonales  o situaciones desafiantes y realizar un seguimiento de cómo responden los y las estudiantes. 

¡Es momento de implementar el aprendizaje social y emocional en tu institución educativa y preparar a tus estudiantes para saber cómo actuar ante cualquier desafío!

Fuentes de información:

  1. https://www.edutopia.org/article/pathway-better-social-and-emotional-learning 
  2. https://www.edutopia.org/article/3-sel-practices-teachers-can-use-every-day
  3. https://www.edutopia.org/article/sel-begins-teacher
  4. https://www.edutopia.org/article/assessing-social-and-emotional-learning
  5. https://www.edutopia.org/article/daily-ritual-builds-trust-and-community-among-students

*CORPOEDUCACIÓN no es responsable por las opiniones ofrecidas en este espacio.